Las frutas y verduras de algunos supermercados y mercados semanales podrían estar contaminadas con el químico perclorato, según recoge el portal Fresh plaza del canal alemán NDR.
Según estas fuentes, el programa 'Markt' ha analizado 17 muestras de sandías, calabacines y lechugas de distintos países de origen, a los que se realizaron las correspondientes pruebas de laboratorio, detectándose que en casi todas las muestras hay presencia de perclorato.
El perclorato detiene la absorción de yodo en el cuerpo y, por tal razón, se usa como un medicamento para la tiroides.
Tres de las muestras contenían perclorato a un nivel mayor que la cantidad máxima recomendada, según el Instituto Alemán de Evaluación de Riesgos. El alto nivel de perclorato se encontró especialmente en los calabacines españoles de Lidl. Además, el análisis mostró que sandías españolas y lechuga belga de Edeka tienen gran cantidad de perclorato. Edeka anunció que ellos estaban tomando en serio los resultados. A los productores implicados se les pidió intensificar los controles. Lidl también se dirigió a los proveedores en este sentido.
El Ministerio Alemán de Protección al Consumidor considera que la presencia de perclorato en la alimentación es un nuevo problema, según NDR. Las autoridades responsables están trabajando intensamente para esclarecer las causas.
El ministerio sospecha que los fertilizantes son la causa de la contaminación. El perclorato se crea cuando la luz UV golpea compuestos que contienen cloro en la atmósfera, mientras que la lluvia y polvo llevan el producto químico al agua.
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