Los mini, Capio o Palermo ganan peso en detrimento de las variedades tradicionales de pimiento
El secretario provincial de COAG, Andrés Góngora, confirma una mayor apuesta de estos cultivos en Almería por la mayor demanda de países como Alemania.
Aunque a principios de campaña algunas cooperativas y empresas exportadoras de la provincial de Almería parecían tener problemas para encontrar agricultores que cultivaran especialidades de pimiento, el secretario provincial de COAG, Andrés Góngora, confirma a Revista Mercados que la tendencia está cambiando, y cada vez son más los productores que apuestan por variedades mini y otras especialidades como Capia, Palermo o Cuerno de toro, desplazando a los pimientos más tradicionales (California, Lamuyo e Italiano).
“Creo que a las especialidades les espera un buen futuro”, asegura Góngora. Se trata de productos cada vez más demandados por mercados como el alemán, atraen al consumidor final, ávido de productos diferentes y con más sabor y dulzura, y además en algunos casos son muy productivas, como le sucede al Palermo. Por todo ello, cabe esperar que a medio o largo plazo les suceda como al tomate cherry, que comenzó con volúmenes pequeños y se ha popularizado en los cultivos almerienses, gracias al aumento del consumo.
Buenos precios
Aunque la superficie de pimiento cultivada en Almería en esta campaña es similar a la del ejercicio anterior (unas 9.000 Has), la ola de calor sufrida este verano provocó problemas en la polinización de los frutos y la producción está siendo menor que la de otros años, lo que ha derivado en un aumento de los precios en origen que está beneficiando al sector en este primer tramo de la campaña. “La media en las variedades tradicionales está por encima del euro”, confirma el secretario general de Coag, unas cotizaciones que se alejan de las mínimas que se registraron en 2014/15 con hasta 0,2 €/kg en el caso del California amarillo. La “incógnita” son las especialidades que el año pasado tuvieron una media de 1,2 euros/kg en el caso del Palermo, y el sector está a la espera de ver qué cotizaciones alcanza.
Además, aunque aún es pronto para prever si la campaña seguirá esta evolución tan positiva en precios, un buen indicador es el escalonamiento de la producción, por lo que “no se esperan avalanchas de producto” que puedan perjudicar la oferta-demanda.
Las cadenas miran a Almería
Debido al desplazamiento de la producción turca a Rusia como efecto colateral del veto impuesto a las importaciones europeas, y a la inestabilidad que provocan conflictos como el de Siria, entre otros, Góngora asegura que las grandes cadenas europeas están apostando cada vez más por Almería para abastecerse. “El escenario mundial les asusta, y nosotros ofrecemos estabilidad, seguridad y calidad”.
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